Reflexiones

Saturday, February 02, 2008

La Invocación y El Dhikr (Recuerdo de Dios)

Concepción del Espacio Sagrado
Además, la característica "repetitiva" del rito tiene que ver con su carácter "homeopático" ("similis similem producit"), según el cual la "repetición" ritual del acto fundante hecha en el mismo lugar y de la misma manera en que fue realizado originariamente por el ancestro mítico, asegura siempre, a futuro, la realización del efecto buscado (1
Es preciso aclarar que la mera repetición de los nombres Divinos, sin la debida atención, no da resultados eficaces. Durante la invocación de los nombres Divinos, es preciso concentrar todas las facultades en el significado y verdadero entendimiento de estos Nombres.
La oración es sin duda el sistema más eficaz para ponernos en equilibrio, para contactarnos con Dios o nuestro Maestro interno, el mejor sistema para solucionar todos los problemas, de cualquier tipo. No es la oración un sistema cristiano, solamente, por mas que así han tratado de hacerlo parecer, todas las culturas lo hacen. Métodos o maneras de orar cada persona empleara el suyo, pero son solo herramientas, caminos para que nuestra mente, nuestra emoción y nuestro espíritu generen la paz, la prosperidad, el nirvana, en definitiva la comunión con Dios, nuestro Maestro interior
"Igualmente el mismo Espíritu viene en ayuda de nuestra debilidad porque no sabemos orar como es debido, pero el Espíritu intercede por nosotros con gemidos inefables" (*)
Las actitudes fundamentales Preparación----Leer todo el texto que hayamos preparado, muy despacio, revisando cada uno de sus puntos. considerar que la accion liberadora de Dios alcanza toda mi persona, mis pensamientos, mi mis sentidos , etc. Cuando nos descubrimos un error o falla, pensar en su contrario, por ejemplo si somos mentirosos, pensar como siendo veraces nuestra vida tendria mas sentido y nuestras amistades mas cercania. Dar gracias a Dios por todo lo bueno que hay en nuestra vida y en nosotros. NO SE TRATA DE ANGUSTIARSE POR LO MALO, SINO DE DIALOGAR CON DIOS SOBRE ELLO Y REVALORIZAR LO BUENO.

En cuanto al grado de realidad del universo imaginado, nuestra respuesta podrá parecer quizá un deseo o una provocación, pues no disponemos de un esquema de la realidad que admita un mundo intermedio entre el mundo de los elementos sensibles, con los conceptos que expresan sus leyes empíricamente verificables, y el mundo espiritual, el reino de los espíritus, al que sólo la fe tiene todavía acceso. La degradación de la Imaginación en fantasía es ya un hecho consumado. Se opondrá entonces la fragilidad y la gratuidad de las creaciones del arte a la consistencia de las realizaciones “sociales”, que serán propuestas como justificación, e incluso como explicación, de aquéllas. Finalmente, entre lo real empíricamente comprobable y lo real sin más, no habrá ya grados intermedios. Todo lo indemostrable, lo invisible, lo inaudible, será catalogado como creación de la imaginación, es decir, como producto de la facultad que segrega lo imaginado, lo irreal. En este contexto de agnosticismo, se entenderá que la divinidad y todas sus formas son creaciones de la imaginación, lo que equivale a decir, algo irreal. ¿Qué puede significar el orar a esa divinidad, sino que se es presa de una ilusión desesperada? Creo que ahora podemos calibrar con una sola mirada el abismo que separa esta idea totalmente negativa de la Imaginación y la que vamos a tratar, y, anticipándonos a los textos que vendrán a continuación, podemos responder ya que, precisamente porque esa divinidad es una creación de la Imaginación, es real y existe, y por eso mismo la oración que a ella se dirige tiene un sentido (2)
poder imaginativo divino: la Imaginación divina creadora es esencialmente Imaginación teofánica. La Imaginación activa en el gnóstico es a su vez, igualmente, Imaginación teofánica; los seres que ella “crea” subsisten con una existencia independiente, sui generis, en el mundo intermedio que le es propio. El Dios que ella “crea”, lejos de ser un producto irreal de nuestra fantasía, es también una teofanía, pues la Imaginación activa del ser humano no es sino el órgano de la Imaginación teofánica absoluta (takhayyol motlaq). La Oración es una teofanía por excelencia; en este sentido, es “creadora”; pero precisamente el Dios al que ora porque lo “crea”, es el Dios que se revela a ella en esta Creación, y esta Creación, en este instante, es una de las teofanías cuyo sujeto real es la divinidad revelándose a sí misma. Se encadenan aquí, de manera rigurosa, toda una serie de ideas y paradojas. Debemos rememorar algunas, esenciales, antes de considerar el órgano de esta Imaginación teofánica en el ser humano, que es el corazón, y la creatividad del corazón.
El Guía de la senda espiritual, para curar a su discípulo de los apetitos sensuales, le recomienda la medicina contenida en el recuerdo de los nombres Divinos. La repetición de estos nombres Divinos sin la atención fija en su significado completo, es idolatría. El discípulo, por medio de la atención constante hacia las verdades contenidas en estos Nombres, se purifica y es adornado por los atributos Divinos. (3

La línea que separa algunas oraciones de una medi­ta­ción es en realidad muy tenue.

Me parece un tesoro tan extenso de ali­mento espiritual que por sí solo sería suficiente para se­guir con él por mil años. Las meditaciones que contiene, en las que se hallan reflexiones divinas y comunión con Dios, al igual que temas teológicos y verdades místicas, son lamentablemente demasiado extensas para ser incor­poradas en una obra de esta naturaleza, pero recomiendo encarecidamente que de aquí en adelante se usen en conjunto con el material contenido en el resto de este li­bro.
Al tratar de nadar a través del mar de estas medi­tacio­nes, uno se da cuenta de un constante cambio de tema;
-- no son éstas ejercicios intelectuales, en los que un erudito se sienta a desarrollar un argumento,
-- sino que están mu­cho más cerca de las fuerzas de la natu­raleza, ¿y eso qué tiene de malo? El viento revolotea en torno a un árbol, haciéndolo doblarse, ora hacia el este, ora hacia el oeste, haciendo que sus ramas for­men un millar de dibujos cambiantes; si uno mira el cielo nocturno, tal vez salga la luna por la izquierda, por la derecha pase un meteorito, en tanto que la Vía Láctea resplandece arriba; cada ola que rompe en la playa remueve un centenar de nuevas conchas y guija­rros formando un diseño diferente en la arena. La ins­piración divina, que brota a través del alma y la mente de Bahá'u'lláh, me parece que es así en estas meditaciones: un maravilloso espectáculo pirotécnico en que Él trata un tema tras otro y expone una verdad tras otra, ¡y a veces, dentro de la meditación misma viene una oración, como una joya en un joyero, una perla dentro de una madreperla! (4**)

MEDITACION DE LA LUZ INTERNA

Baha ú lláh dice que hay un signo de Dios en cada fenómeno; el signo del intelecto es la contemplación, y el signo de la contemplación es el silencio, por cuanto es imposible que un hombre haga dos cosas a la vez; no puede hablar y meditar.
Es un hecho axiomático que mientras se medita se esta hablando con el propio espíritu. En tal estado de ánimo, le hacéis ciertas preguntas a vuestro espíritu y él os contesta, La Luz se abre paso y se manifiesta la realidad.
No podéis Llamar "hombre' a cualquier ser carente de esta facultad de meditar; sin ella seria un simple ani­mal mas bajo que las bestias.
Por medio de la facultad de la meditación el hom­bre alcanza la Vida Eterna; por medio de ella recibe el soplo del Espíritu Santo. Los dones del Espíritu son dados por la reflexión y la meditación.
El espíritu del hombre es informado, y fortaleci­do durante la meditación; a través de ella cosas ignora­das por el hombre son desarrolladas ante su vista. Por medio de ella recibe inspiración divina y alimento ce­lestial.
La meditación es la Llave que abre la puerta de los misterios. En ese estado el hombre se abstrae; se aleja de todos los objetos que le rodean; en este estado sub­jetivo se sumerge en el océano de vida espiritual y puede descubrir los secretos de las cosas en sí. Para ilustrar esto, pensad en un hombre dotado con dos clases de vista; cuando se usa el poder de visión interna el poder externo de visión no puede realmente ver,
Esta facultad de meditación libra al hombre de la naturaleza animal, discierne la realidad de las cosas y pone al hombre en contacto con Dios.
Esa facultad atrae de los planos invisibles, las cien­cias y las artes. A través de la facultad meditativa, se hacen posibles las invenciones, y grandes obras se lle­van a efecto; a través de ella los gobiernos actúan fá­cilmente, Por esta facultad el hombre entra en el ver­dadero Reino de Dios.
No obstante hay algunos pensamientos inútiles pa­ra el hombre; son como olas del mar que se mueven sin resultado alguno. Pero si la facultad de meditación está bañada de luz interna y caracterizada con los atributos Divinos, sus resultados serán confirmados.
La facultad meditativa es semejante a un espejo; si lo ponéis ante objetos terrenales, los reflejará. Por con­siguiente, si el espíritu del hombre está en contempla­ción de cosas terrenales, será informado de ellas.
Pero si volvéis vuestro espejo espiritual hacia el cielo, las constelaciones celestiales y los rayos del Sol de la Realidad se reflejarán en vuestros corazones, y obtendréis las Virtudes del Reino.
Por consiguiente, conservemos esta facultad debi­damente dirigida,
Volviéndola hacia el Sol Celestial, y no hacia los objetos terrenales, para que podamos des­cubrir los secretos del Reino y comprender las alegorías de la Biblia, y los misterios del espíritu.
Que seamos en realidad espejos que reflejen las realidades celestiales, y que nos volvamos tan puros que podamos reflejar las estrellas del cielo".(5)
Quien hoy crea firmemente en el renacimiento del hombre y esté plenamente consciente de que Dios, el Exaltadísimo, esgrime una ascendencia suprema y una autoridad absoluta sobre esta nueva creación, cierta­mente, tal hombre es contado entre aquellos que están dotados de perspicacia en esta grandisima Revelación. De ello es testigo todo creyente de discernimiento.
Camina en lo alto sobre el mundo del ser a través del Poder del Más Grande Nombre, para que puedas tomar conciencia de los misterios inmemoriales, y estés enterado de lo que nadie se ha enterado. Verdaderamente, tu Señor es el Socorredor, el Omnisciente, el Todo Informado. Es como una arteria palpitante, pulsando en el cuerpo de la creación entera, para que a través del Calor generado por este movimiento, pueda aparecer aquello que vivifique 1os corazones de los indecisos.(6)
La diferenciación encantadoramente sencilla de don Adib es: cuando oramos, estamos tratando de decirle a Dios lo que nosotros queremos que Dios haga por nosotros. Cuando leemos estamos tratando de dejar que Dios nos diga lo que Dios quiere que nosotros hagamos. el Ing. Taherzadeh explica la diferencia entre dos actividades características de la vida mística bahá’í: orar y leer. (7)

Recuerdo de Dios

¡Oh hijos de los hombres! Si creéis en el único Dios Verdadero, seguidme a Mi que soy el Mayor Recuerdo de Dios enviado por vuestro Señor para que El pueda perdonar bondadosamente vuestras faltas. En verdad, El es perdonador y compasivo hacia el concurso de los fieles. Nosotros, en verdad, escogemos a los Mensajeros mediante la potencia de nuestra Palabra y ensalzamos a su descendencia, algunos por encima de otros, a través del Gran Recuerdo de Dios, tal como está decretado en el Libro y oculto en él...
Temed a Dios y no pronunciéis una sola palabra relativa a su Mayor Recuerdo salvo lo que ha sido ordenado por Dios, por cuanto hemos establecido un convenio aparte referente a El con cada Profeta y sus seguidores. En verdad, no hemos enviado a ningún Mensajero sin haber contraído este convenio; en verdad, Nosotros no emitimos juicios sobre cosa alguna salvo después de haberse establecido el convenio de Aquel que es la puerta Suprema. Antes de que pase mucho tiempo, a la hora señalada, se levantará el velo de vuestros ojos. Entonces contemplaréis al sublime Recuerdo de Dios con claridad y nitidez. (Capítulo V).(8)

¡Oh vosotros, parientes del Más Grande Recuerdo! Este Árbol de Santidad, teñido de carmesí con el óleo de la servidumbre, ha nacido de vuestra propia tierra, en el medio de la Zarza Ardiente, y aún así no habéis comprendido nada de El ni de sus verdaderos atributos celestiales, ni de las circunstancias reales de su vida terrena, ni de las evidencias de su comportamiento valeroso y perfecto. Impulsados por vuestros propios caprichos, Le consideráis ajeno a la Verdad soberana, mientras que en la estimación de Dios El no es sino el Prometido mismo, dotado con el poder de la Verdad soberana, y, en verdad, El es considerado responsable en el centro de la Zarza Ardiente, según lo decretado en el Libro Madre...
¡Oh Qurratu'l-'Ayn! Pronuncia el llamado de la más exaltada Palabra a las siervas de tus semejantes, prevenlas contra el Fuego Mayor y anúnciales la buena nueva de que, después de este poderoso convenio, habrá reunión eterna con Dios en el Paraíso de su complacencia, cerca del Trono de Santidad. Verdaderamente, Dios, el Señor de la creación, tiene poder sobre todas las cosas.
¡Oh Tú Madre del recuerdo! Que la paz y el saludo de Dios estén contigo. Verdaderamente tú has sido fiel pacientemente a Aquel que es el sublime Ser de Dios. Reconoce pues la estación de tu hijo, quien no es sino la poderosa Palabra de Dios. En verdad, El se ha brindado para responder por ti en tu sepulcro y en el Día del Juicio, mientras que en la Tabla Preservada de Dios tú has sido inmortalizada como "la Madre del Fiel" por la Pluma de su Recuerdo. (Capítulo XXVIII).(9)

Temed a Dios y no pronunciéis una sola palabra relativa a su Mayor Recuerdo salvo lo que ha sido ordenado por Dios, por cuanto hemos establecido un convenio aparte referente a El con cada Profeta y sus seguidores. En verdad, no hemos enviado a ningún Mensajero sin haber contraído este convenio; en verdad, Nosotros no emitimos juicios sobre cosa alguna salvo después de haberse establecido el convenio de Aquel que es la puerta Suprema. Antes de que pase mucho tiempo, a la hora señalada, se levantará el velo de vuestros ojos. Entonces contemplaréis al sublime Recuerdo de Dios con claridad y nitidez. (Capítulo V).(10)

Conclusión
En fin, Dikr es un proceso continuo. De hecho, Allah nos dice en el al-Imran de Surah, el verso 191, “los que recuerden a dios cuando están estando parados y cuando ellos se está sentando y cuando están mintiendo.”
Tan con la ayuda de métodos antedichos, debemos poder desarrollar los hábitos de recordar a Dios constantemente siguiendo las maneras prescritas por Allah y demostradas por el profeta.
El remembrance constante alimentará y reformará nuestros corazones y mentes. Esta práctica aumentará nuestra fe para descubrir y para agarrar el mensaje de nuestro Rabb. Dando por resultado la fe del grabado en nuestros corazones. Pero debemos entender que Dikr es un vehículo. ¡No la destinación!
El momento de la toma de contacto con la trascendencia en la meditación es aquél en el cual uno se dirige hacia la presencia divina en nosotros como un "Tú"

Referencias;
1.- Para esto puede verse Frazer, La rama dorada, Ed. castellana de la versión en un volumen, México, Fondo de Cultura Económica, 1944, pp. 33ss..
2.- La imaginación creadora en el sufismo de Ibn Arabí Por Henri Corbin. 3 -www.nematollahi.org/queessufismo_senda.htm – 4** El Deseo del Mundo. Materiales para la contemplación de Dios y su Manifestación para este Día. Recopilados de las palabras de Baha´u´llah por Ruhiyyih Rabbani. El libro Oraciones y Meditaciones de Bahá'u'lláh, compilado y traducido por Shoghi Efendi. 5) PLATICA DE ,ABDU'L · BAHA EN LA CASA DE REUNION DE LA SOCIEDAD DE LOS A MIGOS, LONDRES, W. C.Enero 12 de 1913.la sabiduria de Adbul baha pag 164 6 .- Lawh-i-Hikmat tabla de Sabiduría. 7)Cuaderno de Profundización Nombre: Badí' Villar .
8.- Selección de los Escritos del Báb. Pág. 46

9.- Selección de los Escritos del Báb. Pág. 51- 10. - QAYYÚMU'L-ASMA'




Lima, Peru, 2 de febrero 2008.Por Gerson Elias