la Metafora de la Naturaleza Inferior
La Metáfora de la Naturaleza Inferior
Por Gerson Elías
El Diablo historico A través de la historia hemos comprobado el desarrollo de las creencias sobre el maligno como han sido desarrollas. Sobre su procedencia, en los libros sagrados nos dice que; En la tradición jadeó cristiana cuenta también con dragones y serpientes. La Biblia los identifica con Satanás, en el génesis, una serpiente flanqueo el árbol del Bien y el mal, y origina la desgracia del género humano. La figura del demonio se asoció siempre a la maldad más destructiva, a la insolencia y a la fealdad más repulsiva concebida por la mente humana. Pero cabe hacer un brevísimo repaso a éste ángel caído, el primero que se rebeló ante Dios y fue expulsado del paraíso y excluido de la Creación.
Lucifer fue el primer ángel que despertó y fue la más grande criatura de magnificente belleza en la aurora cósmica. Este ángel tenía una hermosura increíble y no comparada a ninguna otra creación. Todos los Ángeles que fueron creados después de él no tenían la belleza ni la grandeza que poseía el primer ángel de la mañana. El fue el encargado de encender las primeras luces del universo, y en memoria a aquella primera luz se llamó Lucero a la primera estrella de la mañana conocida también como Venus que diariamente aparece antes que llegue el sol.
La raíz latina día significa contrario, obstrucción, y burlón, quiere decir lanzar, proyectar .De allí que diablo es la obstrucción del fluir o curso natural de una cosa, o corriente de vida; todo cuanto ofrezca resistencia al movimiento natural de expansión es diabólicoA esta altura de los tiempos –sobre todo: luego de haber atravesado el siglo XX– son pocos los que no están de acuerdo en lo siguiente:” Dios ha muerto “(y no sólo por decisión de Nietzsche) y; el” Diablo” está más vivo que nunca. No obstante, es arduo entenderlo. El Diablo ha sido un ente subordinado a Dios. Ángel caído, rebelde maligno expulsado del Cielo, seductor implacable al servicio del Mal, el Diablo sólo existe dentro de un contexto. (1) Aspectos del diablo Lo diabólico es lo cruel la crueldad profunda e invisible. Lo satánico es esa misma crueldad pero fustigante, destructora y visible; lo demoníaco es el diablo de cómo la posesión se enseñorea de los seres y de sus almas sobre todo; lo luzbelito es la luz oscura, la soberbia del mal saber y el reniego de la primera esencia; lo mefistofélico es lo formal, es decir lo sardónico, lo cáustico burlón y lo aterrador en la sustancia de la mofa; lo belzebuico es lo grosero, lo vulgar y lo grotesco del diablo (del ego). Títulos: que lo llevan a la personificación; rey de las tinieblas, Príncipe de la carne, Señor del averno, Duque del mal, Rector de este mundo. Se ríe a carcajadas olímpicas El diablo es contra fáctico pues va contra todos lo hechos, y he ahí su fuerza y su grandeza como así mismo su pequeñez y su debilidad. Representado.- por un ser angélico conocido como el calumniador, un arcángel que se rebelo contra Dios antes de la creación del hombre .Aparece en las escrituras bajo cuarenta títulos por lo menos, algunos de los cuales son descriptivos mientras otros son nombres propios. -El de la serpiente, que significa su sutileza
· -Lucero, hijo de la mañana, que fue el nombre en el cielo antes de su caída.
· -Diablo significa calumniador
· -falso acusador de origen griego
· -Satanás que significa resistidor o adversario y es de origen hebreo.
· -También se aplica el vocablo Belial al jefe de los Ángeles caídos, según lo manifiesta el apóstol Pablo en segunda de corintios 6; 15.Otras menciones descriptivas son; Abadon (hebreo) y Apolion (griego) (Apocalipsis 9; 11) que significa destructor.etc.etc.
En Isaías 28; 15 se ase un supuesto lugar de procedencia, al ángel de la muerte pero no se dice que estos reinos estuvieron regidos por Satán o cualquier ángel caído. En el pasaje de Isaías 14; 9-15 se viene interpretando tradicionalmente como una comparación con la caída de Lucifer a causa de su orgullo, fue expulsado del reino celestial. Más tarde se le identifico con Satán. Este pasaje de Isaías que en el fondo es una profecía contra Babilonia da idea de Lucifer como ángel caído.
Por otro lado, en los textos del antiguo testamento, el mal siempre esta subordinado a Dios. Cualesquiera sea la forma en que se le representa, el mal no puede nunca sobrepasar los limites establecidos por Dios ni alcanzar a sus criaturas.
El Lenguaje Figurativo ! La personificación es un tipo de lenguaje hablado y escrito que presta calidades humanas, sentimientos, acciones y otras características a los seres y objetos inanimados. Por ejemplo, La ventana me guiñeó el ojo. Al otro lado del puente está la literatura, y en ella, la poesía. Su material expresivo es la palabra la cual está cargada de significado pero carece de corporeidad. La tarea del escritor es, por tanto, darle consistencia. Que la podamos mirar, tocar, morder como a un delicioso fruto. Y esta labor está encomendada a la metáfora. Son muchas sus definiciones y no vienen al caso. Más importante es el gozo de capturarlas al leer o escribir. Camaleón del texto, miméticas en su arco iris semántico, las metáforas viajan al núcleo del lenguaje, dan lustre a las palabras desgastadas por el uso, arrojan sus redes de asociaciones y unen lo semejante y lo diverso. Hay un relámpago de intuiciones cuando una de ellas porta la llave que abrirá nuestro espíritu a la contemplación de la verdad y belleza que habitan cada uno de los rincones de lo aparente y lo oculto. Cuando la palabra da en el blanco a través de la metáfora, los objetos más comunes, las situaciones más triviales se muestran en toda su complejidad: por el ojo de la aguja del tiempo cotidiano pasan, no sólo el camello bíblico sino peces, árboles derribados y expediciones al mundo invisible.*
Se puede comprobar algún grado de resonancia de este dualismo extremo en la teodicea cristiana medieval y en el fundamentalismo cristiano contemporáneo. Por lo que respecta a la teodicea bahá’í, el problema del mal es explicado en términos neoplatónicos como la ausencia de la luz divina; el mal no tiene existencia positiva ni tampoco existen entes malignos. La metafísica bahá’í no da cabida a satanología alguna. (a)
La imaginación y la incipiente iglesia católica de otros tiempos reunió en un solo personaje a todos estos nombres para meter dentro de la misma bolsa todo aquello que no se ajustaba al orden que trataba de imponer en sus tiempos. El alma eterna misma no tiene dos naturalezas. En la vida después de la muerte, solamente lleva sus cualidades buenas. En una carta escrita de su parte, Shoghi Effendi aviso a un creyente, Alfred Luna, que el alma del hombre, o quiere decir su yo eterno o realidad, no es dualista. De otro modo la inteligencia o alma racional tiene dos naturalezas debido a la influencia del alma y sus cualidades divinas ya desarrolladas y del “yo”,la manifestación del espíritu animal, lo cual se refiere en los escritos de Bahaullah, el Báb y Adbul Bahá como El Malvado, Satanás, El Diablo ,etc. Bahá’u´llah dice en los Siete Valles,”hay que consumir los velos del satánico yo con el fuego del amor, a fin de purificar y limpiar el alma, para que pueda esta comprender la posición del Señor de la Creación. También dice en Los Cuatro Valles, Mate estas cuatro aves de presa se refiere a cualidades malévolas se refiere a los cuatro instintos de la naturaleza animal del hombre alimentarse, huir, pelear y aparear (2) carta de Shoghi Effendi Luces de guía borrador 698: Los siete valles pág. 21: Los Cuatro Valles pág. 70.
Hablaremos del Diablo en dos sentidos:
· como negación del orden social establecido;
· como negación del sentido divino de la Historia.
La dictadura –como todo orden represivo– se postulaba como el Bien, como el Cielo. Su espacio era sagrado y perfecto. Plena afirmación, una geografía en la que sólo se podía y sólo se permitía ser feliz. ¿Qué era escupir en el Cielo? Era escupir en el espacio sagrado, negarlo No es casual que luego de la dictadura la democracia se postule como un nuevo Cielo. Un Cielo no represivo que alertaba una y otra vez contra la existencia de los demonios. De los dos demonios que habían malogrado la democracia y volverían a malograrla si no se los echaba del Cielo, o, al menos, si no se los mantenía lejos, más allá. El terror que provenía tanto desde la extrema derecha como de la extrema izquierda”. En el medio, una sociedad inocente. Esta sociedad (la de la inocencia) es la que recupera su espacio con la democracia. Son esos “honestos ciudadanos sobrevivientes del caos” que menciona Ellos, ahora, deberán velar contra los demonios (Nota: ver el capítulo “Referentes y demonios” de mi ensayo La sangre derramada).(3)(Nota: ver el capítulo “Referentes y demonios” de mi ensayo La sangre derramada). El Cielo de los militares advertía contra un demonio, la subversión; el Cielo de la democracia contra dos, la extrema derecha y la extrema izquierda. Así, el Cielo es siempre un espacio de pureza e inocencia que debe luchar contra la agresión incansable del Demonio. Además, ese espacio existe en tanto existe el Demonio, de aquí que todo espacio de pureza busque demonizar a Otro para justificarse. Hoy, el Cielo de la democracia ya ha demonizado a quienes, dice, lo agreden: en Europa los inmigrantes; en América latina los marginados, los excluidos, los delincuentes. Ocurre que el Cielo de la democracia –que se ha transformado en el Cielo del mercado– es cada vez más estrecho, cobija a menos ángeles (ángeles rumbosos y extravagantes) y crea, día a día, incesante, hambrientos demonios. No es casual que el Diablo se convierta en una figura fascinante. Escupe contra lo establecido, contra lo sacralizado. Se revela, quiere ser lo Otro de Dios. Quiere encontrar en el Mal la expresión suprema de la libertad. Si la historia humana, en tanto expresión de una desobediencia fundante, existe es porque existe como pecado, porque el Diablo tentó a Eva, porque Eva tentó a Adán, porque comieron el fruto del árbol del conocimiento y fueron arrojados del Cielo. Por haber escupido en él. (4) te recomiendo que leas el libro ensayo de Charles Holby, Cáp. Tres de Como vivir 100 años siempre al servicio de la Causa de Dios y sus siervos, es sobre el progreso espiritual.
El siglo pasado se marquetio al diablo, en las películas. El Anticristo viene a destruir el sentido y el final de la historia de la cristiandad. Viene a negar la redención, a impedir la consumación de la Historia por la que Cristo se sacrificó.. Sobre el fin de los tiempos, escribe: “Quien trate de ver las profundas señales de los tiempos tendrá que conservar siempre a la vista lo que acontezca a los judíos (...) Y es doctrina teológica general que, antes del fin temporal de la historia, el judaísmo, como pueblo, se convertirá a Cristo, de forma que algunos teólogos han entendido que entre las cosas que retardan todavía el fin del mundo, está la incredulidad persistente de Israel”. Tal vez, conjeturo, no falten quienes anhelen la continuidad del obstinado descreimiento de Israel para que el mundo, cotidianamente, siga existiendo. Volveremos sobre él porque expresa como pocos las paranoicas imaginerías del tomismo acerca del Anticristo, presentes en la mayoría de los films de Hollywood . El primer sentido del Diablo, el que lo entiende como subversión del orden social. Para las visiones cristianas (que demonizan, si se me permite decirlo así, al Diablo) el ángel caído subvierte el orden de Dios. Para las visiones dialécticas –inspiradas en Hegel y Marx, con un toque nietzscheano– el Diablo subvierte el orden burgués. Hollywood los idealiza y los trata románticamente (aunque jamás sin mostrar ese trágico, sangriento final que dice: El crimen no paga) No son bandoleros con una ideología de sustitución. No son subversivos. Agreden el Cielo de la burguesía, pero lo aceptan. Y aunque no se integran, jamás piensan reemplazarlo. Habla la edad media; la pregunta está a la mano de cualquiera que piense con mediana hondura estas cuestiones: si Dios es bueno, ¿por qué permite el Mal? Pocos hombres de la Iglesia se han planteado esto con mayor desgarramiento que San Agustín. No lo hizo Santo Tomás.. El agustinismo se expresa en primera persona: adquiere la forma de las confesiones. Donde Santo Tomás estratifica el Saber, San Agustín habla desde la duda, desde el desgarramiento. Así, en sus Confesiones, dice: “¿Quién me ha hecho a mí? ¿No me ha hecho mi Dios, que no sólo es bueno, sino la misma bondad? ¿Pues de dónde me vino a mí el querer el mal y no querer el bien?”. Vemos, aquí, el punto central de la confesión: yo deseo el Mal y no el Bien; si Dios, que es el Bien, me hizo, ¿de dónde surge esta atracción por el Mal? Sigue San Agustín: “¿Quién puso esta voluntad dentro de mí? ¿Quién sembró esta semilla de amargura en mí, habiendo sido hecho por mi Dios, que es la dulzura misma? Y si la puso el diablo, ¿quién hizo al diablo?”. Agustín conoce la respuesta bíblica: el Diablo era un ángel bueno que se hizo demonio. No le alcanza. Pregunta cómo llegó el Diablo a poseer esa voluntad mala que lo hizo demonio. Lo que implica seguir preguntando la misma insidiosa, lacerante pregunta: “¿Dónde está el mal? ¿De dónde y por dónde se ha colado en el mundo? ¿Cuál es su raíz y su semilla?”. Y también: “¿De dónde viene, pues, el mal, si Dios hizo todas las cosas buenas y siendo bueno las hizo buenas? Todos necesitan encontrar paz para su espíritu y acaso más un hombre ligado a una concepción de lo sagrado sin contradicciones internas.¿Quién queda? El hombre, claro. Agustín habrá de recurrir al mito del pecado. El Mal existe porque el hombre ha pecado; idea que habrá de redondear –con menos dudas y desgarramientos– San Buenaventura: el Mal existe porque el hombre ha obrado por causa de sí y no por causa de Dios, y esto es el pecado. (5) A todo esto debo cantar, las trovas de Silvio Rodrigues; Yo no se, como hay quien malversa la vida como hay quien invoca una herida como pueden gastar el amor.
Las extendidas diferencias que existen entre la humanidad y el predominio de la sedición, la controversia, el conflicto, etc., son los factores básicos que provocan la aparición del espíritu satánico. Sin embargo, el Espíritu Santo siempre ha rehuido estas cuestiones. Un mundo en el que no se percibe más que lucha, peleas y corrupción, está destinado a convertirse en la sede del trono, la misma metrópolis, de Satanás” (Bahá’u’lláh, Lawh-i-Maqsúd, Tablas, p. 206-7).
Si nos paramos a pensar, nos puede dejar un tanto perplejos la escasez de referencias al diablo que existen en la Biblia. Algo incomprensible, sobre todo teniendo en cuenta el papel antagónico en la historia de Dios y de la Religión. De hecho, en cualquier buena película "el malo" tiene casi tantos minutos en escena como "el bueno".Hoy en día el diablo a llegado a ser un pobre diablo y si se porta bien puede santificarse. El hombre posee el carácter innato, el heredado y el adquirido, este último resultado de la educación. A propósito del carácter innato, hay que tener presente que si bien la creación de Dios es absolutamente buena, ello no impide que las diferencias observadas en las cualidades naturales de la persona provengan de diferencias de grado. Todos los hombres son excelentes; mas unos lo son en mayor grado, y otros en menor grado. Todos los hombres están dotados de inteligencia y capacidades; pero una y otras, como los propios méritos, varían según la persona. De ello no cabe duda.
Por ejemplo, tomemos cierto número de niños de una misma familia, de un mismo entorno y de una misma escuela, educados por un mismo maestro, criados con el mismo alimento, en un mismo clima, con las mismas ropas, e instruidos en las mismas lecciones. Es indudable que entre esos mismos niños algunos se mostrarán diestros en ciencias, otros poseerán una habilidad media, y otros serán torpes. De ahí resulta evidente que en la naturaleza original existen diferencias de grado, y una diversidad de méritos y capacidades. Tales diferencias no entrañan bondad o maldad, sino simplemente diferencias de grado: existe un grado superior, otro intermedio, y otro inferior. Así como existe el hombre, asimismo existen el animal, la planta y el mineral; lo único que cambia son los grados de estas cuatro clases de existencia. Ahora bien, ¡qué diferencia entre el ser del hombre y el del animal! Aún así, los dos son seres. Es obvio, pues, que en el mundo del ser hay diferencias de grado.6
En la creación no existe el mal, todo es bueno. Ciertas cualidades y rasgos naturales innatos de algunas personas que en apariencia son censurables, en realidad no lo son. Por ejemplo, desde el comienzo de su vida al lactar el niño de pecho da muestras de codicia, enojo e irritación. Según eso, podría aducirse que la bondad y la maldad son inherentes a la realidad humana, y que ello es contrario a la bondad absoluta de la naturaleza y de la creación. La respuesta es que la ambición, consistente en desear más y más, es una característica loable siempre que sea ejercida convenientemente. Si un hombre ambiciona adquirir ciencia y conocimiento, llegar a ser compasivo, generoso y justo, sus esfuerzos son dignos de alabanza. Si dirige su enojo y su ira hacia los sangrientos tiranos que se asemejan a las bestias feroces, ese empeño es muy loable. Por el contrario, si no emplea dichas cualidades de manera apropiada, se hace acreedor a la censura. Es evidente, entonces, que en la creación la maldad no existe en absoluto.7
Por lo que respecta a la Biblia, las referencias al diablo o satanás únicamente figuran en las Escrituras Judías posteriores al destierro a Babilonia, y en el Nuevo Testamento. La Torah o Pentateuco no menciona al diablo, ni la esperanza escatológica de la resurrección. Para los exegetas judíos, Isaías se estaba refiriendo a Babilonia tal como lo indica la generalidad del texto y el contexto histórico de su revelación. Los cristianos adoptaron la creencia en el diablo del judaísmo tardío influenciado por el zoroastrianismo de los maggis y por el gnosticismo. Para las religiones babi-bahai, el diablo o Satanás es un mito sin existencia objetiva. Este mito trata sobre los vicios asociados con la rebeldía y la traición .Dajjal (anti-cristo), en la tradición popular bahai; Azal es con frecuencia asociado con el mito del ángel caído, Iblis Lucifer .El arquetipo del dajjal es el falso amigo que finge de confidente a un líder religioso o político .8
Igualmente, los escritos Bahais dejan perfectamente clara la no creencia bahai en el existencia objetiva de Satanás o de cualquier otro poder o fuerza maligna de este tipo8 Contestación a unas Preguntas ,”La inexistencia del Mal ,p. p317-318)Se nos explica que lo que el hombre percibe como malvado dentro de si mismo es simplemente la ausencia de alguna cualidad positiva (cuya falta se percibe quizás de forma especialmente aguda si la persona se encuentra súbitamente en una situación en que la cualidad que no posee habría sido muy útil. Asimismo los impulsos fuertes o irracionales no son se afirma – consecuencia de la acción sobre nosotros de alguna fuerza extrínseca maligna, sino por el contrario, de deseos subjetivos que surgen de dentro de nosotros mismos, debido posiblemente a una falta previa de una disciplina adecuada o a la existencia de alguna necesidad profunda que no hayamos satisfecho de manera sana (o que ,en cualquier caso, no se ha satisfecho correctamente)Abdul-Bahá explica que un desarrollo incorrecto puede distorsionar nuestras facultades intrínsecamente buenas, naturales(otorgadas por Dios),y transformarlas en cualidades adquiridas negativas y destructivas: La facultad es de dos clases : la facultad natural y la facultad adquirida. La primera que es creación de Dios ,es puramente buena ,en la creación de Dios no existe el mal ;pero la facultad adquirida se ha convertido en una causa de la aparición del mal .Por ejemplo Dios ha creado a todos los hombres de tal manera ,y les ha dado una constitución y una facultades tales que les beneficia el azúcar y la miel y les destruye el veneno .Esta naturaleza y constitución son innatas Dios las ha concedido a toda la humanidad por igual. Pero el hombre poco a poco compensa a acostumbrarse al veneno tomando una pequeña cantidad cada día y aumentando esta gradualmente, hasta que llega a un punto en que no puede vivir sin un gramo de opio cada día. Por esto ,las facultades naturales están totalmente distorsionadas .Observa cuanto mas se pueden cambiar la facultad y constituciones naturales, hasta que mediante diferentes hábitos y entrenamientos se pervierten por completo .No se critica a las personas viciosas por sus facultades y su naturaleza innatas, sino mas bien por sus facultades y naturaleza adquiridas,(9)LA INEXISTENCIA DEL MAL La verdadera explicación de este tema es muy difícil. Has de saber que los seres son de dos clases: materiales y espirituales, o sea, seres perceptibles a los sentidos y seres intelectuales.Las cosas perceptibles son las que se perciben mediante los cinco sentidos exteriores; son los seres externos que llamamos perceptibles, como los que ve el ojo. Los seres intelectuales son los que no poseen una existencia exterior, sino que son concepciones de la mente. Por ejemplo, la mente misma es un entidad intelectual carente de existencia visible. Todas las características y cualidades humanas constituyen existencias intelectuales imperceptibles. Brevemente, las realidades intelectuales, como las cualidades y perfecciones admirables del hombre, existen y son totalmente buenas. El mal es, simplemente, su no existencia. Así pues, la ignorancia es la falta de conocimiento; el error es la falta de guía; el olvido es la falta de memoria; la necedad es la falta de buen sentido. Todos estos vicios no tienen existencia real.De igual manera, las realidades sensibles son absolutamente buenas, y el mal es debido a su no existencia, es decir, la ceguera es falta de visión, la sordera es falta de audición, la pobreza es falta de riqueza, la enfermedad es falta de salud, la muerte es falta de vida, y la debilidad es falta de fuerza.No obstante, se plantea la duda sobre los escorpiones y las serpientes venenosos. Puesto que son seres vivientes ¿son buenos o malos? El escorpión y la serpiente son malos con respecto al hombre. Con respecto a sí mismos, no son malos. A decir verdad, su veneno es su arma, y su picadura el modo de defenderse. Como los componentes de su veneno no están de acuerdo con nuestros elementos corporales, es decir, como existe antagonismo entre diferentes elementos, de ahí el mal. Aún así, son buenos en cuanto tales.En definitiva, es posible que una cosa en relación a otra sea mala y al mismo tiempo no serlo dentro de los límites de su ser. Queda demostrado, pues, que en la Creación el mal no existe. Todo lo que Dios creó lo hizo bien. La maldad es la nada, tal como la muerte es la ausencia de vida. El hombre muere cuando no recibe más vida. La oscuridad es la ausencia de luz; cuando no existe la luz, existe la oscuridad. La luz es una cosa existente, mas la oscuridad es una cosa no existente. La riqueza es una cosa existente, mas la pobreza es una cosa no existente.De ahí se deduce que todo mal se reduce a la no existencia. El bien existe; el mal no existe.10
· Referencias.
· 1 -Del Dominical, lima 22 de enero 1989, Por Guillermo Casallo Trujillo *.- LA METÁFORA, ARQUITECTURA SENSORIAL DE LA IMAGINACIÓN Ramón Iván Suárez Caamal. (a)- Consultar la sección “La inexistencia del Mal” del libro “Contestación a unas preguntas”de ‘Abdu’l-Bahá. (Barcelona: Editorial Bahá’í de España, 1994. 1ª Edición). La Retórica Gnóstica de la Espiritualidad en las Escrituras Bahá’ís. Badí Villar en La Pluma del Conocimiento.
· 2)-capitulo 3 Como Vivir 100 años; se Charles Lobby.
· 3.-María Elena Walsh en El País Jardín de Infantes. Nota: ver el capítulo “Referentes y demonios” de mi ensayo La sangre derramada.
· 4.-José Pablo Feinmann, Crítica a la nación
· 5.-El Barón Rojo, Por José Pablo Feinmann
· 6.- (Abdu'l-Bahá, Contestación a unas preguntas)
· 7.- (Abdu'l-Bahá, Contestación a unas preguntas)
· 8.- Diálogos bahais, una respuesta de Badi Villar.
· 9.--Abdul l-Bahá: respuestas a unas Preguntas, Ebila p.262.El Concepto de Espiritualidad .por William S. Hatcher .La Lógica de las leyes Espirituales.
· 10.- La inexistencia del Mal” del libro “Contestación a unas preguntas”de ‘Abdu’l-Bahá.
Por Gerson Elías
El Diablo historico A través de la historia hemos comprobado el desarrollo de las creencias sobre el maligno como han sido desarrollas. Sobre su procedencia, en los libros sagrados nos dice que; En la tradición jadeó cristiana cuenta también con dragones y serpientes. La Biblia los identifica con Satanás, en el génesis, una serpiente flanqueo el árbol del Bien y el mal, y origina la desgracia del género humano. La figura del demonio se asoció siempre a la maldad más destructiva, a la insolencia y a la fealdad más repulsiva concebida por la mente humana. Pero cabe hacer un brevísimo repaso a éste ángel caído, el primero que se rebeló ante Dios y fue expulsado del paraíso y excluido de la Creación.
Lucifer fue el primer ángel que despertó y fue la más grande criatura de magnificente belleza en la aurora cósmica. Este ángel tenía una hermosura increíble y no comparada a ninguna otra creación. Todos los Ángeles que fueron creados después de él no tenían la belleza ni la grandeza que poseía el primer ángel de la mañana. El fue el encargado de encender las primeras luces del universo, y en memoria a aquella primera luz se llamó Lucero a la primera estrella de la mañana conocida también como Venus que diariamente aparece antes que llegue el sol.
La raíz latina día significa contrario, obstrucción, y burlón, quiere decir lanzar, proyectar .De allí que diablo es la obstrucción del fluir o curso natural de una cosa, o corriente de vida; todo cuanto ofrezca resistencia al movimiento natural de expansión es diabólicoA esta altura de los tiempos –sobre todo: luego de haber atravesado el siglo XX– son pocos los que no están de acuerdo en lo siguiente:” Dios ha muerto “(y no sólo por decisión de Nietzsche) y; el” Diablo” está más vivo que nunca. No obstante, es arduo entenderlo. El Diablo ha sido un ente subordinado a Dios. Ángel caído, rebelde maligno expulsado del Cielo, seductor implacable al servicio del Mal, el Diablo sólo existe dentro de un contexto. (1) Aspectos del diablo Lo diabólico es lo cruel la crueldad profunda e invisible. Lo satánico es esa misma crueldad pero fustigante, destructora y visible; lo demoníaco es el diablo de cómo la posesión se enseñorea de los seres y de sus almas sobre todo; lo luzbelito es la luz oscura, la soberbia del mal saber y el reniego de la primera esencia; lo mefistofélico es lo formal, es decir lo sardónico, lo cáustico burlón y lo aterrador en la sustancia de la mofa; lo belzebuico es lo grosero, lo vulgar y lo grotesco del diablo (del ego). Títulos: que lo llevan a la personificación; rey de las tinieblas, Príncipe de la carne, Señor del averno, Duque del mal, Rector de este mundo. Se ríe a carcajadas olímpicas El diablo es contra fáctico pues va contra todos lo hechos, y he ahí su fuerza y su grandeza como así mismo su pequeñez y su debilidad. Representado.- por un ser angélico conocido como el calumniador, un arcángel que se rebelo contra Dios antes de la creación del hombre .Aparece en las escrituras bajo cuarenta títulos por lo menos, algunos de los cuales son descriptivos mientras otros son nombres propios. -El de la serpiente, que significa su sutileza
· -Lucero, hijo de la mañana, que fue el nombre en el cielo antes de su caída.
· -Diablo significa calumniador
· -falso acusador de origen griego
· -Satanás que significa resistidor o adversario y es de origen hebreo.
· -También se aplica el vocablo Belial al jefe de los Ángeles caídos, según lo manifiesta el apóstol Pablo en segunda de corintios 6; 15.Otras menciones descriptivas son; Abadon (hebreo) y Apolion (griego) (Apocalipsis 9; 11) que significa destructor.etc.etc.
En Isaías 28; 15 se ase un supuesto lugar de procedencia, al ángel de la muerte pero no se dice que estos reinos estuvieron regidos por Satán o cualquier ángel caído. En el pasaje de Isaías 14; 9-15 se viene interpretando tradicionalmente como una comparación con la caída de Lucifer a causa de su orgullo, fue expulsado del reino celestial. Más tarde se le identifico con Satán. Este pasaje de Isaías que en el fondo es una profecía contra Babilonia da idea de Lucifer como ángel caído.
Por otro lado, en los textos del antiguo testamento, el mal siempre esta subordinado a Dios. Cualesquiera sea la forma en que se le representa, el mal no puede nunca sobrepasar los limites establecidos por Dios ni alcanzar a sus criaturas.
El Lenguaje Figurativo ! La personificación es un tipo de lenguaje hablado y escrito que presta calidades humanas, sentimientos, acciones y otras características a los seres y objetos inanimados. Por ejemplo, La ventana me guiñeó el ojo. Al otro lado del puente está la literatura, y en ella, la poesía. Su material expresivo es la palabra la cual está cargada de significado pero carece de corporeidad. La tarea del escritor es, por tanto, darle consistencia. Que la podamos mirar, tocar, morder como a un delicioso fruto. Y esta labor está encomendada a la metáfora. Son muchas sus definiciones y no vienen al caso. Más importante es el gozo de capturarlas al leer o escribir. Camaleón del texto, miméticas en su arco iris semántico, las metáforas viajan al núcleo del lenguaje, dan lustre a las palabras desgastadas por el uso, arrojan sus redes de asociaciones y unen lo semejante y lo diverso. Hay un relámpago de intuiciones cuando una de ellas porta la llave que abrirá nuestro espíritu a la contemplación de la verdad y belleza que habitan cada uno de los rincones de lo aparente y lo oculto. Cuando la palabra da en el blanco a través de la metáfora, los objetos más comunes, las situaciones más triviales se muestran en toda su complejidad: por el ojo de la aguja del tiempo cotidiano pasan, no sólo el camello bíblico sino peces, árboles derribados y expediciones al mundo invisible.*
Se puede comprobar algún grado de resonancia de este dualismo extremo en la teodicea cristiana medieval y en el fundamentalismo cristiano contemporáneo. Por lo que respecta a la teodicea bahá’í, el problema del mal es explicado en términos neoplatónicos como la ausencia de la luz divina; el mal no tiene existencia positiva ni tampoco existen entes malignos. La metafísica bahá’í no da cabida a satanología alguna. (a)
La imaginación y la incipiente iglesia católica de otros tiempos reunió en un solo personaje a todos estos nombres para meter dentro de la misma bolsa todo aquello que no se ajustaba al orden que trataba de imponer en sus tiempos. El alma eterna misma no tiene dos naturalezas. En la vida después de la muerte, solamente lleva sus cualidades buenas. En una carta escrita de su parte, Shoghi Effendi aviso a un creyente, Alfred Luna, que el alma del hombre, o quiere decir su yo eterno o realidad, no es dualista. De otro modo la inteligencia o alma racional tiene dos naturalezas debido a la influencia del alma y sus cualidades divinas ya desarrolladas y del “yo”,la manifestación del espíritu animal, lo cual se refiere en los escritos de Bahaullah, el Báb y Adbul Bahá como El Malvado, Satanás, El Diablo ,etc. Bahá’u´llah dice en los Siete Valles,”hay que consumir los velos del satánico yo con el fuego del amor, a fin de purificar y limpiar el alma, para que pueda esta comprender la posición del Señor de la Creación. También dice en Los Cuatro Valles, Mate estas cuatro aves de presa se refiere a cualidades malévolas se refiere a los cuatro instintos de la naturaleza animal del hombre alimentarse, huir, pelear y aparear (2) carta de Shoghi Effendi Luces de guía borrador 698: Los siete valles pág. 21: Los Cuatro Valles pág. 70.
Hablaremos del Diablo en dos sentidos:
· como negación del orden social establecido;
· como negación del sentido divino de la Historia.
La dictadura –como todo orden represivo– se postulaba como el Bien, como el Cielo. Su espacio era sagrado y perfecto. Plena afirmación, una geografía en la que sólo se podía y sólo se permitía ser feliz. ¿Qué era escupir en el Cielo? Era escupir en el espacio sagrado, negarlo No es casual que luego de la dictadura la democracia se postule como un nuevo Cielo. Un Cielo no represivo que alertaba una y otra vez contra la existencia de los demonios. De los dos demonios que habían malogrado la democracia y volverían a malograrla si no se los echaba del Cielo, o, al menos, si no se los mantenía lejos, más allá. El terror que provenía tanto desde la extrema derecha como de la extrema izquierda”. En el medio, una sociedad inocente. Esta sociedad (la de la inocencia) es la que recupera su espacio con la democracia. Son esos “honestos ciudadanos sobrevivientes del caos” que menciona Ellos, ahora, deberán velar contra los demonios (Nota: ver el capítulo “Referentes y demonios” de mi ensayo La sangre derramada).(3)(Nota: ver el capítulo “Referentes y demonios” de mi ensayo La sangre derramada). El Cielo de los militares advertía contra un demonio, la subversión; el Cielo de la democracia contra dos, la extrema derecha y la extrema izquierda. Así, el Cielo es siempre un espacio de pureza e inocencia que debe luchar contra la agresión incansable del Demonio. Además, ese espacio existe en tanto existe el Demonio, de aquí que todo espacio de pureza busque demonizar a Otro para justificarse. Hoy, el Cielo de la democracia ya ha demonizado a quienes, dice, lo agreden: en Europa los inmigrantes; en América latina los marginados, los excluidos, los delincuentes. Ocurre que el Cielo de la democracia –que se ha transformado en el Cielo del mercado– es cada vez más estrecho, cobija a menos ángeles (ángeles rumbosos y extravagantes) y crea, día a día, incesante, hambrientos demonios. No es casual que el Diablo se convierta en una figura fascinante. Escupe contra lo establecido, contra lo sacralizado. Se revela, quiere ser lo Otro de Dios. Quiere encontrar en el Mal la expresión suprema de la libertad. Si la historia humana, en tanto expresión de una desobediencia fundante, existe es porque existe como pecado, porque el Diablo tentó a Eva, porque Eva tentó a Adán, porque comieron el fruto del árbol del conocimiento y fueron arrojados del Cielo. Por haber escupido en él. (4) te recomiendo que leas el libro ensayo de Charles Holby, Cáp. Tres de Como vivir 100 años siempre al servicio de la Causa de Dios y sus siervos, es sobre el progreso espiritual.
El siglo pasado se marquetio al diablo, en las películas. El Anticristo viene a destruir el sentido y el final de la historia de la cristiandad. Viene a negar la redención, a impedir la consumación de la Historia por la que Cristo se sacrificó.. Sobre el fin de los tiempos, escribe: “Quien trate de ver las profundas señales de los tiempos tendrá que conservar siempre a la vista lo que acontezca a los judíos (...) Y es doctrina teológica general que, antes del fin temporal de la historia, el judaísmo, como pueblo, se convertirá a Cristo, de forma que algunos teólogos han entendido que entre las cosas que retardan todavía el fin del mundo, está la incredulidad persistente de Israel”. Tal vez, conjeturo, no falten quienes anhelen la continuidad del obstinado descreimiento de Israel para que el mundo, cotidianamente, siga existiendo. Volveremos sobre él porque expresa como pocos las paranoicas imaginerías del tomismo acerca del Anticristo, presentes en la mayoría de los films de Hollywood . El primer sentido del Diablo, el que lo entiende como subversión del orden social. Para las visiones cristianas (que demonizan, si se me permite decirlo así, al Diablo) el ángel caído subvierte el orden de Dios. Para las visiones dialécticas –inspiradas en Hegel y Marx, con un toque nietzscheano– el Diablo subvierte el orden burgués. Hollywood los idealiza y los trata románticamente (aunque jamás sin mostrar ese trágico, sangriento final que dice: El crimen no paga) No son bandoleros con una ideología de sustitución. No son subversivos. Agreden el Cielo de la burguesía, pero lo aceptan. Y aunque no se integran, jamás piensan reemplazarlo. Habla la edad media; la pregunta está a la mano de cualquiera que piense con mediana hondura estas cuestiones: si Dios es bueno, ¿por qué permite el Mal? Pocos hombres de la Iglesia se han planteado esto con mayor desgarramiento que San Agustín. No lo hizo Santo Tomás.. El agustinismo se expresa en primera persona: adquiere la forma de las confesiones. Donde Santo Tomás estratifica el Saber, San Agustín habla desde la duda, desde el desgarramiento. Así, en sus Confesiones, dice: “¿Quién me ha hecho a mí? ¿No me ha hecho mi Dios, que no sólo es bueno, sino la misma bondad? ¿Pues de dónde me vino a mí el querer el mal y no querer el bien?”. Vemos, aquí, el punto central de la confesión: yo deseo el Mal y no el Bien; si Dios, que es el Bien, me hizo, ¿de dónde surge esta atracción por el Mal? Sigue San Agustín: “¿Quién puso esta voluntad dentro de mí? ¿Quién sembró esta semilla de amargura en mí, habiendo sido hecho por mi Dios, que es la dulzura misma? Y si la puso el diablo, ¿quién hizo al diablo?”. Agustín conoce la respuesta bíblica: el Diablo era un ángel bueno que se hizo demonio. No le alcanza. Pregunta cómo llegó el Diablo a poseer esa voluntad mala que lo hizo demonio. Lo que implica seguir preguntando la misma insidiosa, lacerante pregunta: “¿Dónde está el mal? ¿De dónde y por dónde se ha colado en el mundo? ¿Cuál es su raíz y su semilla?”. Y también: “¿De dónde viene, pues, el mal, si Dios hizo todas las cosas buenas y siendo bueno las hizo buenas? Todos necesitan encontrar paz para su espíritu y acaso más un hombre ligado a una concepción de lo sagrado sin contradicciones internas.¿Quién queda? El hombre, claro. Agustín habrá de recurrir al mito del pecado. El Mal existe porque el hombre ha pecado; idea que habrá de redondear –con menos dudas y desgarramientos– San Buenaventura: el Mal existe porque el hombre ha obrado por causa de sí y no por causa de Dios, y esto es el pecado. (5) A todo esto debo cantar, las trovas de Silvio Rodrigues; Yo no se, como hay quien malversa la vida como hay quien invoca una herida como pueden gastar el amor.
Las extendidas diferencias que existen entre la humanidad y el predominio de la sedición, la controversia, el conflicto, etc., son los factores básicos que provocan la aparición del espíritu satánico. Sin embargo, el Espíritu Santo siempre ha rehuido estas cuestiones. Un mundo en el que no se percibe más que lucha, peleas y corrupción, está destinado a convertirse en la sede del trono, la misma metrópolis, de Satanás” (Bahá’u’lláh, Lawh-i-Maqsúd, Tablas, p. 206-7).
Si nos paramos a pensar, nos puede dejar un tanto perplejos la escasez de referencias al diablo que existen en la Biblia. Algo incomprensible, sobre todo teniendo en cuenta el papel antagónico en la historia de Dios y de la Religión. De hecho, en cualquier buena película "el malo" tiene casi tantos minutos en escena como "el bueno".Hoy en día el diablo a llegado a ser un pobre diablo y si se porta bien puede santificarse. El hombre posee el carácter innato, el heredado y el adquirido, este último resultado de la educación. A propósito del carácter innato, hay que tener presente que si bien la creación de Dios es absolutamente buena, ello no impide que las diferencias observadas en las cualidades naturales de la persona provengan de diferencias de grado. Todos los hombres son excelentes; mas unos lo son en mayor grado, y otros en menor grado. Todos los hombres están dotados de inteligencia y capacidades; pero una y otras, como los propios méritos, varían según la persona. De ello no cabe duda.
Por ejemplo, tomemos cierto número de niños de una misma familia, de un mismo entorno y de una misma escuela, educados por un mismo maestro, criados con el mismo alimento, en un mismo clima, con las mismas ropas, e instruidos en las mismas lecciones. Es indudable que entre esos mismos niños algunos se mostrarán diestros en ciencias, otros poseerán una habilidad media, y otros serán torpes. De ahí resulta evidente que en la naturaleza original existen diferencias de grado, y una diversidad de méritos y capacidades. Tales diferencias no entrañan bondad o maldad, sino simplemente diferencias de grado: existe un grado superior, otro intermedio, y otro inferior. Así como existe el hombre, asimismo existen el animal, la planta y el mineral; lo único que cambia son los grados de estas cuatro clases de existencia. Ahora bien, ¡qué diferencia entre el ser del hombre y el del animal! Aún así, los dos son seres. Es obvio, pues, que en el mundo del ser hay diferencias de grado.6
En la creación no existe el mal, todo es bueno. Ciertas cualidades y rasgos naturales innatos de algunas personas que en apariencia son censurables, en realidad no lo son. Por ejemplo, desde el comienzo de su vida al lactar el niño de pecho da muestras de codicia, enojo e irritación. Según eso, podría aducirse que la bondad y la maldad son inherentes a la realidad humana, y que ello es contrario a la bondad absoluta de la naturaleza y de la creación. La respuesta es que la ambición, consistente en desear más y más, es una característica loable siempre que sea ejercida convenientemente. Si un hombre ambiciona adquirir ciencia y conocimiento, llegar a ser compasivo, generoso y justo, sus esfuerzos son dignos de alabanza. Si dirige su enojo y su ira hacia los sangrientos tiranos que se asemejan a las bestias feroces, ese empeño es muy loable. Por el contrario, si no emplea dichas cualidades de manera apropiada, se hace acreedor a la censura. Es evidente, entonces, que en la creación la maldad no existe en absoluto.7
Por lo que respecta a la Biblia, las referencias al diablo o satanás únicamente figuran en las Escrituras Judías posteriores al destierro a Babilonia, y en el Nuevo Testamento. La Torah o Pentateuco no menciona al diablo, ni la esperanza escatológica de la resurrección. Para los exegetas judíos, Isaías se estaba refiriendo a Babilonia tal como lo indica la generalidad del texto y el contexto histórico de su revelación. Los cristianos adoptaron la creencia en el diablo del judaísmo tardío influenciado por el zoroastrianismo de los maggis y por el gnosticismo. Para las religiones babi-bahai, el diablo o Satanás es un mito sin existencia objetiva. Este mito trata sobre los vicios asociados con la rebeldía y la traición .Dajjal (anti-cristo), en la tradición popular bahai; Azal es con frecuencia asociado con el mito del ángel caído, Iblis Lucifer .El arquetipo del dajjal es el falso amigo que finge de confidente a un líder religioso o político .8
Igualmente, los escritos Bahais dejan perfectamente clara la no creencia bahai en el existencia objetiva de Satanás o de cualquier otro poder o fuerza maligna de este tipo8 Contestación a unas Preguntas ,”La inexistencia del Mal ,p. p317-318)Se nos explica que lo que el hombre percibe como malvado dentro de si mismo es simplemente la ausencia de alguna cualidad positiva (cuya falta se percibe quizás de forma especialmente aguda si la persona se encuentra súbitamente en una situación en que la cualidad que no posee habría sido muy útil. Asimismo los impulsos fuertes o irracionales no son se afirma – consecuencia de la acción sobre nosotros de alguna fuerza extrínseca maligna, sino por el contrario, de deseos subjetivos que surgen de dentro de nosotros mismos, debido posiblemente a una falta previa de una disciplina adecuada o a la existencia de alguna necesidad profunda que no hayamos satisfecho de manera sana (o que ,en cualquier caso, no se ha satisfecho correctamente)Abdul-Bahá explica que un desarrollo incorrecto puede distorsionar nuestras facultades intrínsecamente buenas, naturales(otorgadas por Dios),y transformarlas en cualidades adquiridas negativas y destructivas: La facultad es de dos clases : la facultad natural y la facultad adquirida. La primera que es creación de Dios ,es puramente buena ,en la creación de Dios no existe el mal ;pero la facultad adquirida se ha convertido en una causa de la aparición del mal .Por ejemplo Dios ha creado a todos los hombres de tal manera ,y les ha dado una constitución y una facultades tales que les beneficia el azúcar y la miel y les destruye el veneno .Esta naturaleza y constitución son innatas Dios las ha concedido a toda la humanidad por igual. Pero el hombre poco a poco compensa a acostumbrarse al veneno tomando una pequeña cantidad cada día y aumentando esta gradualmente, hasta que llega a un punto en que no puede vivir sin un gramo de opio cada día. Por esto ,las facultades naturales están totalmente distorsionadas .Observa cuanto mas se pueden cambiar la facultad y constituciones naturales, hasta que mediante diferentes hábitos y entrenamientos se pervierten por completo .No se critica a las personas viciosas por sus facultades y su naturaleza innatas, sino mas bien por sus facultades y naturaleza adquiridas,(9)LA INEXISTENCIA DEL MAL La verdadera explicación de este tema es muy difícil. Has de saber que los seres son de dos clases: materiales y espirituales, o sea, seres perceptibles a los sentidos y seres intelectuales.Las cosas perceptibles son las que se perciben mediante los cinco sentidos exteriores; son los seres externos que llamamos perceptibles, como los que ve el ojo. Los seres intelectuales son los que no poseen una existencia exterior, sino que son concepciones de la mente. Por ejemplo, la mente misma es un entidad intelectual carente de existencia visible. Todas las características y cualidades humanas constituyen existencias intelectuales imperceptibles. Brevemente, las realidades intelectuales, como las cualidades y perfecciones admirables del hombre, existen y son totalmente buenas. El mal es, simplemente, su no existencia. Así pues, la ignorancia es la falta de conocimiento; el error es la falta de guía; el olvido es la falta de memoria; la necedad es la falta de buen sentido. Todos estos vicios no tienen existencia real.De igual manera, las realidades sensibles son absolutamente buenas, y el mal es debido a su no existencia, es decir, la ceguera es falta de visión, la sordera es falta de audición, la pobreza es falta de riqueza, la enfermedad es falta de salud, la muerte es falta de vida, y la debilidad es falta de fuerza.No obstante, se plantea la duda sobre los escorpiones y las serpientes venenosos. Puesto que son seres vivientes ¿son buenos o malos? El escorpión y la serpiente son malos con respecto al hombre. Con respecto a sí mismos, no son malos. A decir verdad, su veneno es su arma, y su picadura el modo de defenderse. Como los componentes de su veneno no están de acuerdo con nuestros elementos corporales, es decir, como existe antagonismo entre diferentes elementos, de ahí el mal. Aún así, son buenos en cuanto tales.En definitiva, es posible que una cosa en relación a otra sea mala y al mismo tiempo no serlo dentro de los límites de su ser. Queda demostrado, pues, que en la Creación el mal no existe. Todo lo que Dios creó lo hizo bien. La maldad es la nada, tal como la muerte es la ausencia de vida. El hombre muere cuando no recibe más vida. La oscuridad es la ausencia de luz; cuando no existe la luz, existe la oscuridad. La luz es una cosa existente, mas la oscuridad es una cosa no existente. La riqueza es una cosa existente, mas la pobreza es una cosa no existente.De ahí se deduce que todo mal se reduce a la no existencia. El bien existe; el mal no existe.10
· Referencias.
· 1 -Del Dominical, lima 22 de enero 1989, Por Guillermo Casallo Trujillo *.- LA METÁFORA, ARQUITECTURA SENSORIAL DE LA IMAGINACIÓN Ramón Iván Suárez Caamal. (a)- Consultar la sección “La inexistencia del Mal” del libro “Contestación a unas preguntas”de ‘Abdu’l-Bahá. (Barcelona: Editorial Bahá’í de España, 1994. 1ª Edición). La Retórica Gnóstica de la Espiritualidad en las Escrituras Bahá’ís. Badí Villar en La Pluma del Conocimiento.
· 2)-capitulo 3 Como Vivir 100 años; se Charles Lobby.
· 3.-María Elena Walsh en El País Jardín de Infantes. Nota: ver el capítulo “Referentes y demonios” de mi ensayo La sangre derramada.
· 4.-José Pablo Feinmann, Crítica a la nación
· 5.-El Barón Rojo, Por José Pablo Feinmann
· 6.- (Abdu'l-Bahá, Contestación a unas preguntas)
· 7.- (Abdu'l-Bahá, Contestación a unas preguntas)
· 8.- Diálogos bahais, una respuesta de Badi Villar.
· 9.--Abdul l-Bahá: respuestas a unas Preguntas, Ebila p.262.El Concepto de Espiritualidad .por William S. Hatcher .La Lógica de las leyes Espirituales.
· 10.- La inexistencia del Mal” del libro “Contestación a unas preguntas”de ‘Abdu’l-Bahá.
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